El espejo del líder - David Fischman

Vivimos en una era de cambio constante. Para que las organizaciones continúen siendo competitivas deben realizar mejoras a través del cambio y del aprendizaje, esto es algo que siempre nos recordaba mi profesor del curso de Recursos Humanos;los recursos materiales se pueden innovar o rediseñar; pero lo que resulta difícil es el recurso humano que debe enfrentar el cambio.

Ahora les presento lo que aprendí leyendo un gran libro como es "El espejo del líder" escrito por David Fischman:
La premisa de la que parte este libro es que un líder es ante todo un observador: tiene que conocerse a sí mismo, saber mirarse en el espejo y conocer a la gente con la que trabaja. El espejo del líder ayuda a vernos a nosotros mismos a través del “espejo” que es el primer paso para auto-liderar el cambio que nos permita ser mejores y liderar nuestras vidas, aquí lo que se requiere:

Control del ego

Con este primer paso, me quede impresionada pues según la psicología el ego es el yo, sin embargo la definición de ego que se utiliza en el libro está relacionada con la autoestima.

El ego es una personalidad inferior que se crea cuando la persona tiene una autoestima baja, trata de ocultar a toda costa que la persona se siente poco valorada o insegura.

Claro que el ego es inherente al ser humano, lasí que lo que se tiene que hacer con él es mantenerlo bajo control y dejar de pensar en nosotros mismos, en destacar o en figurar y pensemos mejor en todo lo que podemos hacer para ayudar y permitir crecer a las personas de nuestro entorno.

Equilibrio

Para ser exitosos en los estudios y en los negocios no necesitamos vivir en estrés. Al contrario, mientras más equilibrados estemos, mejores decisiones tomaremos. De la misma forma en que se le da mantenimiento a una máquina, se le tiene que dar mantenimiento al cuerpo y a la mente.

Una forma de hacerlo es cuidando lo que entra en nuestra mente, tenemos que hacer pasar los pensamientos que nos permitan crecer y desarrollarnos. Otra de las formas es no pensar durante unos minutos al día y sólo relajarnos para darnos cuenta de que dentro de nosotros existe un lindo lugar lleno de paz y felicidad.

Desapego

Este es uno de los más difíciles (sobretodo para mi) pues tenemos apego a los bienes materiales o a nuestras metas, creemos que es normal pero no lo es cuando nos convencemos de que sin lograr obtenerlas no podemos ser felices. 
El desapego implica alejarnos de las cosas vanales y entender que nuestra existencia es cíclica. Lograr el desapego es saber que dentro de nosotros tenemos todo lo que Dios nos dio para ser felices y que lo exterior es solo un complemento de nuestra vida.

Responsabilidad

Y nos preguntamos por qué nos cuesta ser responsables...Es aquí donde se interrelaciona los capítulos anteriores del libro: Cuando no estamo en equilibrio, cuando el ego nos controla y cuando nos apegamos a las metas; es más difícil tener libertad para ser responsables de nuestros actos.

El liderazgo  es un camino de desarrollo personal y empieza por tener la capacidad de dirigirse a uno mismo. No se puede liderar a otros si no puedo dar primero el ejemplo.

Trabajo en equipo

Cuando se tiene lo anteriormente descrito en el libro de Fischman, las personas están listas para trabajar en equipo.

También se requiere de una comunicación abierta y sincera para crear un ambiente que favorezca discutir diversos puntos de vista.

Los miembros de un equipo también dependen unos de otros, así que para lograr un equipo exitoso debemos involucrarnos y orientarnos al servicio de nuestros compañeros con humildad.

Destrezas Gerenciales

Lo que hace excelente a tu artista o grupo favorito no es la destreza en el baile ni el rango de su voz...¿sabes lo que realmente es? ...la pasión y el amor que le pone. Lo mismo ocurre en una organización, no basta con ser eficientes y productivos, porque la competencia puede igualarnos en eso, lo que hará a la empresa competitiva y diferente es el compromiso y la pasión de su recurso humano.

Para lograr despertar la pasión del personal, se debe trabajar con una visión que todos compartan y saber comunicarla: motivando, entrenando y retroalimentando al personal, dando el ejemplo con integridad.

¿Que tal?. Parecen unos sencillos pasos, pero sabemos que nos costaría un poco (o bastante) lograr ir escalando cada uno de ellos. Es una cuestión de decisión y aprendizaje continuo, quienes quieren seguir mejorando y comprometerse a pensar en los demás antes que en sí mismos, este libro en un valioso instrumento para llegar a ser el líder que todos queremos ser y seguir en la constante búsqueda de nuestra maestría personal.